lunes, 3 de mayo de 2010

Tentaciones que puedes permitirte. (1ª Parte).


Destierra la sensación de culpa y comprueba que es posible sucumbir a ciertos caprichos sin que acabe pesándote. Muchos de ellos, además, aportan beneficios añadidos con los que mimarás de forma saludable tu organismo.

1. Pipas.
Destacan por su aporte en grasas saludables, zinc, hierro, ácido fólico y vitaminas B y E. Una ración de 50 gramos sin pelar (25 gramos peladas o, lo que es lo mismo, unas 20 pipas) suma 140 calorías, tan solo 20 más que una manzana grande, por ello son un excelente capricho entre horas.
Su consumo se relaciona con un menor riesgo de enfermedades degenerativas, cardiovasculares y de cáncer debido a su riqueza en antioxidantes.

2. Gelatina de frutas.
Se trata de un alimento totalmente natural, bajo en calorías y rico en proteínas, al ser de origen animal. Pese a ello está completamente exenta de colesterol y materias grasas. La mejor manera de consumirla es en forma de postre: elígela con fruta añadida y obtendrás una propuesta muy saludable, nutritiva y ligera.
Entre sus proteínas destaca el colágeno, una sustancia natural que favorece la regeneración de las articulaciones, previene lesiones, ayuda a fortalecer los cartílagos y protege la salud ósea. Bastan 10 gramos de gelatina al día para beneficiarte de sus propiedades.

3. Spaghetti “al dente”.
La pasta es un alimento bajo en colesterol y grasas siempre que no esté repleta de carne, salsa y queso. Lo ideal es no pasarse con las raciones, y elegir una salsa ligera, como por ejemplo de tomate, champiñones y un poco de queso rallado. También se puede acompañar de unas gambas salteadas.
La pasta al dente tiene un índice glucémico menor que cuando está más cocida. Esto quiere decir que la velocidad con la que sus azúcares llegan a la sangre es menor, evitándose de esta manera la secreción de insulina. No olvides que esta hormona facilita el depósito de grasa en el cuerpo y, al mismo tiempo, aumenta el apetito.

4. Chocolate.
Tomar más o menos una onza al día o cuando tengas muchas ganas de dulce está permitido e, incluso, es recomendable en las dietas hipocalóricas. Eso sí, debe tener al menos un 60 % de cacao.
Se trata de un alimento muy rico en minerales, especialmente magnesio, hierro y potasio. Estudios recientes destacan su gran poder antioxidante, especialmente beneficioso para el sistema cardiovascular. Lo cierto es que el chocolate levanta pasiones, y también el ánimo. Tomarlo aumenta la producción de serotonina, conocida como la hormona del bienestar.

5. Palomitas.
Si eres de las personas que no puedes imaginar una tarde de cine sin palomitas, debes saber que su consumo en cantidades moderadas no tiene por qué afectar a tu dieta. El problema son las raciones excesivas que ofrecen en las salas comerciales. Opta por compartir o escoger la ración más pequeña y, si aún quieres controlar más el aporte calórico, bastará con no pasarse con la cena posterior.
Debes tener en cuenta que lo que aumenta las calorías es la cantidad de grasas que se les añade durante su elaboración. Por ello, la mejor opción es elaborarlas en casa, con un poco de aceite de oliva. En el cine decántate por las saladas, menos calóricas que las dulces.